Tolosaldea exhibe su microcosmos al mundo, ofreciendo cuatro estilos complementarios de comarca: Naturaleza y turismo rural; riqueza monumental; urbanismo y comercio de calidad contemporáneos; y una de las más vastas ofertas culturales y gastronómicas de Gipuzkoa.

La comarca está rodeada de magníficos espacios ecológicos como la sierra de Aralar, el macizo de Ernio, el biotopo de Leitzaran o el valle de Errezil. Tolosaldea ha sabido compaginar actividades tradicionales de pastoreo y ganadería con otras de ocio y turismo, como los relajantes paseos a pie, bicicleta de montaña o a caballo.

Existen numerosas muestras de interés arquitectónico histórico, tanto civil como religioso, con destacables muestras del gótico vasco y del barroco. Tolosa, cabecera de comarca, destaca por su capitalidad cultural: Incesantes propuestas, algunas de ellas mundialmente reconocidas, como los certámenes internacionales de masas corales y marionetas.

Además de los mercados y ferias dedicadas a productos autóctonos que se celebran durante el año, gastronómicamente, la comarca es conocida por las alubias de Tolosa, las chuletas de vaca o buey, las guindillas de Ibarra, la sidra, los quesos, los productos ecológicos, así como una excelente pastelería en la que destacan los 'xaxus', las tejas y los cigarrillos de Tolosa.

Parque natural de Aralar

La prehistoria de Euskal Herria se conserva aquí. Más de sesenta dólmenes, túmulos, cromlechs y menhires se contabilizan en Aralar, el amplio parque natural que comparten Gipuzkoa y Navarra.

En el Sudeste del territorio guipuzcoano, prolongándose en la Comunidad Foral de Navarra, el macizo calcáreo de Aralar supone una de las áreas montañosas más destacadas de Euskadi, en altura y extensión. También en cuanto a sus valores ecológicos, su patrimonio megalítico y su uso agropecuario: Aralar es la zona de pastoreo más importante de Gipuzkoa, con protagonismo de la oveja latxa.

La silueta aislada del monte Txindoki (1.331 metros) es punto de referencia para montañeros y senderistas, que cuentan con un sinfín de pequeños y grandes recorridos balizados mediante los cuales adentrarse en los paisajes del parque natural, con puntos singulares como el escarpado 'domo de Ataun', el hayedo de Akaitz o el circo glacial de Pardelutz.

En el alto de Lizarrusti, en el barrio Aia de Ataun, se encuentra el Centro de Acogida y de Interpretación del parque. Cuenta con un restaurante y un albergue con 36 literas y una habitación doble adaptada para personas con movilidad reducida.

FLORA Y FAUNA

Sobre el parque de Aralar suelen volar buitres leonados, alimoches, águilas reales y hasta quebrantahuesos. El visón europeo y el hocicudo, junto al corzo y el jabalí, son algunas de las 147 especies de vertebrados catalogadas. Conforme crece la altitud, los encinares y robledales de Aralar dejan paso a los hayedos y roquedos.

Centro de Turismo activo Leitzaran

La Vía Verde del Plazaola.

El pequeño tren del Plazaola unía Gipuzkoa y Navarra siguiendo el estrecho curso de río Leitzaran. Desaparecido el ferrocarril, su trazado es ideal para pasear a pie o en bicicleta.

Muy cerca de la industrial y populosa vega del Oria, un afluente suyo de aguas limpias y abundantes meandros transcurre por un solitario valle, convertido en todo un pulmón verde. Se trata del sinuoso río Leitzaran, que se extiende desde Leitza (Navarra) hasta Andoain y fue declarado 'biotopo protegido' en 1995.

FLORA Y FAUNA

El Leitzaran es, ante todo, un río truchero, pero no sólo da cobijo a truchas sino a otras muchas especies animales: tritón pirenáico, desmán ibérico, anguila, piscardo, martín pescador, mirlo acuático,... Viven entre alisos, pinos, alerces, robles y algunas plantas poco frecuentes, como la 'soldanella villosa'.

Ferias y mercados: Introducción

Las compras más auténticas.

Tanto los mercados semanales como las numerosas ferias extraordinarias del año representan buenas ocasiones para conocer y adquirir los productos gastronómicos y artesanales más auténticamente guipuzcoanos.

En Gipuzkoa, el calendario está lleno de oportunidades para comprar artículos artesanales y alimentos típicos. Los mercados semanales de Ordizia, todos los miércoles, y Tolosa, los sábados, están centrados en productos alimentarios procedentes de los caseríos y pequeñas explotaciones agropecuarias del territorio. No obstante, también extienden su oferta a alimentos preparados mediante métodos tradicionales (quesos, dulces,...) y todo tipo de productos manufacturados.

En el otro extremo, hay citas especializadas únicamente en objetos de artesanía. Entre ellas destacan la Feria de Artesanía del País Vasco, que desde hace décadas se celebra en Errenteria el último fin de semana de abril o el primero de mayo, y Artisaualdia, el encuentro de artesanos que tiene lugar en Ordizia en el mes de octubre. Otras muchas pequeñas ferias y mercados permiten ver y, si se desea, comprar objetos de la artesanía local.

Las grandes ferias gastronómicas y agro-ganaderas del año, desde la de Santa Lucía en Zumarraga y Urretxu a la donostiarra de Santo Tomás, suponen excelentes oportunidades para los interesados en adquirir, habitualmente sin intermediarios y directamente de sus productores, tanto alimentos autóctonos como los más diversos productos típicos.